Este jueves, en horas de la tarde y después de una, prolongada deliberación, un Tribunal popular consideró que Karen Oviedo es culpable de haber envenenado a su pareja, Rolando Ángel Aquino (35) y a Elián, hijo del hombre, de solo 9 años, en un hecho ocurrido hace un par de años para lo que habría utilizado el mismo método: darles a beber anticongelante para autos.

Minutos más tarde, el juez técnico, por medio de la secretaría, dio a conocer la sentencia: prisión perpetua para la mujer.

El juicio comenzó este lunes y a lo largo de tres jornadas se escucharon a varios testigos, muchos de ellos profesionales médicos y expertos que profundizaron sobre el etilenglicol empleado para ambos casos.

El juicio por jurado conformado por 12 miembros (seis hombres y otras tantas mujeres) debía fallar, en forma unánime, si consideran a la mujer culpable o no culpable (es decir, inocente) y fue el juez quien dictó la sentencia.

Esta mañana para el Ministerio Público solo hay posibilidad de que el jurado diga en su veredicto: culpable. Fue a lo largo de 1 hora, cuando los fiscales Fernando Guzzo y después Claudia Ríos, se extendieron en detallar las pruebas que, consideraron suficientes que no admiten otra respuesta que la de “culpable”.

Otro tanto hizo, en su momento, la querella. Argumentos que fueron rebatidos, en forma vehemente, por la defensa de la mujer que, sentada junto a sus letrados, siguió la audiencia con atención cada intervención, mostrando un rostro por momentos de angustia y hasta enojo.

La sentencia número 2498 dice: "condenando a Karen Oviedo a la pena de prisión perpetua como autora de los delitos de homicidio agravado por haber sido cometido a través de un procedimiento insidioso (engañoso) por la muerte del menor y por el mismo delito por el padre, sumándole en este caso la agravante del vínculo.